El recién nacido, durante el período de su más temprano desarrollo, técnicamente está vivo, pero está inconsciente de que está vivo o siquiera que es.
Hay quienes vigorosamente insisten en que el momento de la concepción marca el principio de la vida para una personalidad. Esto significa que la consciencia de las bendiciones de la vida no se realiza aún durante los meses prenatales.
¿Podemos estar tan seguros, entonces, que la vida cesa más allá de la puerta a la muerte porque no puede haber consciencia física?...
Quizás deberíamos comenzar a darnos cuenta de que la vida no depende de nuestra habilidad de pensar y estar conscientes.
La misma vida universal que activa al hombre, funciona en formas animales y vegetales. Las plantas en los campos aparentemente no están conscientes y no piensan en la manera del hombre. Sin embargo, vuelven sus hojas hacia el Sol en pos de energía y entierran sus raíces profundamente en la tierra para encontrar la necesaria comida y agua.
Otro factor que contribuye a la creencia en que la muerte lo termina todo, es la discutible relación entre el cerebro y la mente.
El diccionario nos dice que la mente es “el agregado de procesos que se originan en o están asociados con el cerebro”. Cerebro se define como “la parte agrandada y enormemente modificada del sistema nervioso central, contenida en el cráneo de los vertebrados”; pero también se define como “mente, intelecto”.
Cualquier doctor o carnicero sabe que el cerebro es un órgano físico de un cuerpo físico, pero ninguno de ellos ha visto alguna vez una mente.
Hay quienes vigorosamente insisten en que el momento de la concepción marca el principio de la vida para una personalidad. Esto significa que la consciencia de las bendiciones de la vida no se realiza aún durante los meses prenatales.
¿Podemos estar tan seguros, entonces, que la vida cesa más allá de la puerta a la muerte porque no puede haber consciencia física?...
Quizás deberíamos comenzar a darnos cuenta de que la vida no depende de nuestra habilidad de pensar y estar conscientes.
La misma vida universal que activa al hombre, funciona en formas animales y vegetales. Las plantas en los campos aparentemente no están conscientes y no piensan en la manera del hombre. Sin embargo, vuelven sus hojas hacia el Sol en pos de energía y entierran sus raíces profundamente en la tierra para encontrar la necesaria comida y agua.
Otro factor que contribuye a la creencia en que la muerte lo termina todo, es la discutible relación entre el cerebro y la mente.
El diccionario nos dice que la mente es “el agregado de procesos que se originan en o están asociados con el cerebro”. Cerebro se define como “la parte agrandada y enormemente modificada del sistema nervioso central, contenida en el cráneo de los vertebrados”; pero también se define como “mente, intelecto”.
Cualquier doctor o carnicero sabe que el cerebro es un órgano físico de un cuerpo físico, pero ninguno de ellos ha visto alguna vez una mente.
22 comentarios:
Otra vez tienes razón en lo que afirmas, pero y el Dejavu? He leído por ahí que los dos hechos más catastróficos para el ser humnano es el nacimienot y la muerte, tanto que nos hace olvidar nuestras vidas pasadas. Un abrazo
Drac querido amigo, en la muerte, literalmente tomamos un nuevo estado de vida. Entraremos más allá de esa nueva vida con todo el vigor y entusiasmo de la juventud, porque
ciertamente nacimos de nuevo.
¿Qué significa: darnos cuenta?
...Es comenzar a conocer todos los elementos que colaboran con nosotros para construir nuestra vida de todos los días.
...Es comenzar a descubrir, quiénes somos realmente y cuáles son nuestras capacidades.
...Es sorprendernos al descubrir quizás, que la meta de nuestras vidas era sufrir,... cuando creíamos que estábamos muy claros que nuestra meta era ser felices.
Esto del darse cuenta siempre me a llamado la atencion es preciso ir conociendo algunas de las herramientas que nos enseñan a estar CONSCIENTES, para podernos dar cuenta de “en donde estamos” y así: “poder querer salir de situaciones que nos complican la vida”.
Al actuar de una manera diferente,
recibimos una respuesta diferente.
Nosotros elegimos.
Si estas verdades pudieran comunicársenos en otra forma, la vida consciente no sería entonces necesaria para nosotros.
Si la tarea de vivir es el aprendizaje de ciertas verdades, cabe preguntar cuáles son esas verdades. Nadie puede enumerarlas todas, porque no han sido reveladas en su totalidad. En cada era, en cada época, no obstante, hay quienes están descubriendo más y más sobre el conocimiento de la existencia.
Nuestra vida completa pertenece al presente. Esto es todo lo que en realidad poseemos. Tan pronto como podemos darnos cuenta de nuestra existencia, después de nacer, miramos hacia un futuro extenso, a una vida en perspectiva. Al final de esta experiencia consciente miramos hacia atrás, a nuestro largo pasado.
Lo que sentimos, lo que pensamos y hacemos ahora es lo más importante. Después de todo, nunca podremos pensar en el futuro, pues cuando llega es presente por el hecho de darnos cuenta de que existe. Sólo está delante de nosotros un futuro desconocido. Aún más, el pasado nunca está realmente separado de nosotros. El pasado es una condición olvidada o bien una memoria y, como tal, forma parte de nuestra consciencia presente.
Los hombres se han atormentado siempre con la probabilidad de su origen, de dónde vinieron, y de su futuro o destino. Se han torturado con sentimientos mezclados de asombro sobre tales estados, y de temor hacia los misterios del nacimiento y de la muerte. Tratan de ahondar en el pasado para descubrir el principio; tratan, asimismo, de escudriñar mirando hacia adelante para romper ese velo, imaginándose toda clase de condiciones futuras.
las verdaderas respuestas con respecto al nacimiento y a la muerte sólo las encontraremos concentrándonos en la tarea de vivir, al entregarnos de lleno a nuestro estado presente de consciencia, comprendiéndonos a nosotros mismos y a la existencia de la cual podemos darnos cuenta. Ningún acontecimiento, ningún suceso, no importa cuál, o cuán diferente sea de los demás, es completamente independiente.
Amiga, en estas cuestiones nosotros estamos todavia en pañales... Los egipcios, hace 5000 años, sabian mas que nosotros... Para nosotros, somos cuerpo y alma... Ellos eran mas sutiles y distinguian entre el cuerpo, el espiritu (Ba), el componente energetico (Ka) y el componente de luz (Ank)...
Creo que sabian mas que nosotros, amiga, que solo ahora estamos empezando a hablar de lo que seria "el soplo de la vida"...
Un abrazo, Janeth
Por cierto, amiga, el nene está para morderlo sin miramientos...
YO PIENSO KE LO IMPORTANTE ES NO DARLE IMPORTANCIA A LA EXISTENCIA PROPIA, ES DECIR, NO VERNOS VIVIR. SIMPLEMENTE VIVIR Y YA.
ooroale, ahora si me sorprendiste, ya tenia mucho que no venia a vistarte, me ha agradado mucho tu post. Concuerdo contigo.
te mando un saludo desde algún REPETITIVO lugar de México.
"La vida es un gran circo, pero sin espectadores"
ciao
Muy buen post, para seguir pensando..., en lo personal diría Somos Uno, uno con todos nuestros cuerpos, los que se ven y los que no, y Uno con el Universo.
Un fuerte abrazo de luz para todos, Mirta
Por eso estar "conscientes" es estar en el eterno ahora, tomar consciencia de la Presencia es vislumbrar la Eternidad!
Abrazos Janeth.
Estos misterios insondables que nadie puede develar, en fin se sabrá cuando despunte la vida junto a la muerte allá junto a Dios.
Besos
Que misteriosa es la existencia, en todos sus planos de vida, conscientes o inconscientes. El tema del desarrollo de la consciencia y su evolución es apasionante. También creo que la vida es independiente de nuestra habilidad de pensar y estar conscientes pero que sin embargo estas *habilidades* son las que marcan profundamente nuestra vida.
Un abrazo, Janeth.
Hola Janeth,,,,siempre interesante todo lo que nos entregas!!!gracias amiga!!!
Besitos y buen comienzo de semana!!!!
Queridos lectores despues de un reparador fin de semana, vengo a leer sus amables palabras siempre con el fin de aprender y compartir con ustedes, me encanta responder a cada uno, pero ahora por falta de tiempo me veo en la necesidad de escribirles a todos, me encanta saber que siempre estan aqui con sus letras y sus pensamientos....
Yo simplemente estoy compartiendo mi visión, mi alegría. Y estoy disfrutando con ello. Y cualquiera que quiera disfrutarla conmigo, es bienvenido...
Somos conscientes de la vida antes de venir y después de morir? Yo creo que si, porque creo en la materia que se transforma que evoluciona, que existe siempre, no muere. Profundo texto Janeth. Gracias.
Un abrazo muy grande, feliz semana!!!
La mente viaja más allá del tiempo.
Un gran saludo.
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