No es lo mismo tener una Idea que tener un Ideal. Ideas tenemos muchas, nuestras y prestadas, buenas y malas, pero ninguna de ellas va más allá de nuestra esfera intelectual, pues en cuanto trascienden el mundo de los pensamientos, en cuanto se hacen realidad por la fuerza de la voluntad, entonces ya se trata de un Ideal. Un Ideal es una forma de vida, una constante puesta en práctica de aquellas ideas que satisfacen nuestra mente.
16 comentarios:
Janeth lo has dicho mejor que nunca. Breve y contundente.
Un ideal nos lleva la vida. Y con gusto continuamos caminando detrás de él. Una idea es como un dato, en paragón con una información.
No sé si me explico.
Te mando un abrazo, amiga.
Muy bién planteado, Janeth. Una idea es el producto de un esfuerzo cerebral dirigido y llevado a cabo o no.
El ideal trasciende fronteras y está principamente ocupado de cambiar o modificar una estrucrura ya existente.
Abrazos desde Copenhague idealizando a su príncipe perdido,
Ian.
Me gustò la reflexiòn y las imàgenes que has elegido son estupendas.
Un abrazo grande Janeth.
Las ideas Janeth van y vienen, en cambio un ideal es un sueño, una aspiración, una meta, una utopía. Es la expresión imaginaria de algo que se quiere crear o que se pretende modificar.
Los ideales no se bastan a sí mismos para lograr una construcción o un cambio. Entonces surgen las ideas y, casi simultáneamente, las ideologías, que son la exégesis teórica del ideal que se persigue y contienen la descripción detallada del por qué y del cómo para alcanzar un fin.
No se cambia nada sólo con pensar o con hablar de ello. Es preciso actuar, comportarse físicamente de una determinada manera, asumir decisiones y ejecutarlas mediante acciones concretas que produzcan efectos tangibles.
El mundo necesita seres humanos capaces de saber querer. Los seres humanos necesitamos saber querer para crecer y ayudar a nuestro mundo.
En cuestión de convicciones, no interesa la originalidad, el tener una idea nueva nunca expresada hasta ahora, sino vivir con propiedad una idea que puede venir desde tiempos remotos y que, sin embargo, nos resulte útil y apropiada para elaborar todo un sistema de valores relacionados.
Creo que para conseguir plasmar los ideales tengo que abrir la mente bajo sus aspectos de imaginación
creadora e intuición, no cerrarme.
Del ejercicio del pensamiento, del saber escuchar, del saber leer, del detenerse en las palabras y en lo que ellas significan, se abrirá paso poco a poco la confianza en las certezas que empiezan a despuntar.
Es muy valido tambien intentar vivir, aplicar esas ideas e intuiciones, hacerlas nuestras, probar, aunque cometamos errores y equivocaciones, porque también se
aprende de los errores.
Logremos vivir plenamente unos pocos sentimientos grandes, unas pocas ideas claras, experimentaremos la seguridad de sabernos dueños de nosotros mismos.
Claro está que no debemos confundir nuestras convicciones con la verdad
absoluta.
Cada persona posee su propio escudo, confeccionado con materiales que
provienen de sus propios vehículos de expresión.
Nuestros mejores ideales surgen de nuestros mejores pensamientos, nuestras mejores emociones, lo más sano de nuestras energías y de
nuestros actos; es la suma de nuestras virtudes y valores, de nuestras experiencias y logros, de nuestras afirmaciones y crecimiento, de nuestro amor, generosidad y fuerza
de voluntad.
Acertada diferenciación. Breve y categórico. Coincido con la diferenciación. Claro que no sé si lo hubiera definido de manera tan breve y concisa. Un abrazo
Janeth,cuántas ideas cruzan por nuestra cabeza...algunas las llevamos a cabo y otras no...Los ideales requieren tiempo,voluntad,constancia,paciencia y muchas cosas más...por eso no todos conseguimos ese ideal en la vida...
Mi felicitación y mi abrazo inmenso por tu cercanía y tus buenos posts.
Feliz domingo,amiga.
M.Jesús
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