Pensamientos que revolucionarios, que bien interpretados, pueden constituirse en auténticos motores de cambio…


Hablar de Carl Gustav Jung no es una tarea sencilla, ya que parte de su pensamiento es profundo y complejo. Con su capacidad de introspección fue capaz de alumbrar a las demás almas perdidas que habitan en el mundo a encontrarse a sí mismas. Así, aportó luz al conocimiento humano y habló con honestidad sobre los puntos que consideraba necesarios para adentrarnos en la psicología profunda.

"La vida no vivida es una enfermedad de la que se puede morir"

Efectivamente… todos nosotros tenemos deseos, anhelos, motivaciones y un potencial inmenso por descubrir. Muchas veces nos encontramos viviendo una vida que no nos corresponde. Nuestro ser grita y nadie le escucha. Se incomoda y lucha, pero acaba por aceptar un destino que no es el que busca.

A veces acabamos viviendo de una manera que no nos corresponde. Que no cuadra, ni encaja con nosotros. La falta de autenticidad y de verdad con uno mismo pasa factura a nuestro cuerpo y a nuestra mente. Vivir una vida de forma no auténtica tiene repercusiones que tu cuerpo y tus vivencias se encargarán de mostrarte sin tardar demasiado.


"Todo lo que nos irrita de otros nos lleva a un entendimiento de nosotros mismos"

Una vez más las proyecciones mejoran nuestro autoconocimiento. Al mismo tiempo que proyectamos, generamos la oportunidad de ver con nitidez en el otro aquello que no somos capaces de ver en nosotros. O que no queremos ver… la paradoja reside en que ni poniéndolo en este espejo muchas veces somos capaces de reconocerlo.

"Aquello a lo que te resistes, persiste"

Todas las lecciones que has de aprender en tu vida se te repetirán hasta que consigas aprenderlas e incorporarlas en el conocimiento que atesoras sobre ti y sobre el mundo. Cuántas veces has tropezado con el mismo tipo de personas que te han dañado, pero sigues ahí inmolándote en una tarea imposible. O cuántas veces te has visto resistiéndote a aceptar tus sombras.

Las amontonas en un cajón que no quieres ver. Pero siguen ahí, y cuanta más fuerza hagas por esconder tu naturaleza, con más virulencia brotará esta al exterior. De la manera incontrolable e impredecible porque tú, al tratar de taparla con la alfombra, has renunciado a ese control.
"La depresión es como una señora de negro. Si llega, no la expulses, más bien invítala como una comensal en la mesa, y escucha lo que te tiene que decir"

¿Cómo, si no, vamos a entender por qué ha aparecido…? Si no sentamos a estos invitados repentinos en nuestra mesa y les escuchamos, jamás entenderemos por qué aparecieron. Las emociones se agarran a un sentido para existir. Aparecen por un motivo concreto. Algo tiene que ser visto, escuchado y aceptado para poder ser cambiado. Vivir de espaldas a nosotros mismos no nos servirá de mucho. No tardarán en aparecer sensaciones desagradables y difíciles de digerir.

Sin duda, seguramente sean frases que resuenen en ti. Todas ellas nos invitan a ser auténticos, a no tapar lo que es nuestro, a escuchar lo que la vida quiere decirnos y a no darle la espalda. A respetarnos y a respetar a los demás sin colocarles de manera injusta lo que no les corresponde.

6 comentarios:

Mª Jesús Muñoz dijo...

Profundo y sabio tu post, Janet...Realmente es así, cada vivencia y cada circunstancia es una lección para asumir y aprender. El cuerpo y el alma nos hablan, nos muestran la forma de mejorar y elevar el espíritu, de cómo moldear y equilibrar el ego, que tanto daño nos hace si escuchamos sus delirios, deseos y expectativas...Es necesario mirarnos frente a frente y reconocer nuestros fallos y defectos, que nos impiden avanzar y fluir hacia adelante.
Mi gratitud y mi abrazo siempre, amiga.

Navegante dijo...

Muy completo y desarrollado tu post querida amiga. Creo que encontraste la manera clara y precisa de llevar aún más claridad a lo claro del mensaje de Jung, a cuyos libros deberíamos recurrir de manera seguida.
El placer de siempre de pasar por aquí, un beso.

Myriam dijo...

Hermoso texto, Janeth. Estoy muy de acuerdo con la que dices basándote en Jung.

¡Qué gusto venir a visitarte (que hacía tiempo que no, perdón) y encontrarme con esta perla!

Muchos besos, querida amiga

Ildefonso Robledo dijo...

Dejar hablar a la "depresión"... Intentar comprenderla... Realmente impactante, amiga... Me dejas pensando...

Un abrazo fuerte

Esculapio Hijo del Sol dijo...

Hola Janteh,gracias por tu mensaje en mi blog y es mi cierto tu publicación en tu blog cometemos el error de vivir una vida que no nos corresponde y aceptamos de manera pasiva lo que nos viene sin pensar si es verdaderamente lo que queremos para nuestra vida ya que nos acostumbramos a aceptar lo inaceptabale y a vivir la vida en desacuerdo con nuestra esencia.Qué tengas muchas felicidades y te saluda.Roxana González de la Ciudad de Rosario

Olga i Carles (http://bellesaharmonia.blogspot.com dijo...

En el verdadero silencio del alma la escucha nos alimenta hacia la motivación y transformación.

Un abrazo.