La Llamita Interna


Jacobo Boheme fue un maestro de maestros, un hombre humilde -zapatero remendón- quien fue un seguidor de la Luz por medio de la practica de la contemplacion.

La naturaleza era para Boheme la fuente de inspiracion mas grande y era precisamente donde se manifestaba toda la sabiduria y la armonia del universo.

Teósofo Alemán, cuya vida creativa abarcó el período Rosacruciano, fue un místico cuyo discernimiento contribuyó mucho para establecer una interpretación espiritual de la alquimia.

Los escritos de Boheme son de gran extensión y guardan un enorme sistema de ideas, una serie de pensamientos espirituales que no surgieron de la árida intelectualización, sino de su vivencia en comunión con un mundo espiritual.

Quisiera recordar a este maestro no solo por su contenido intelectual, sino por la gran leccion de humildad que el maestro Boheme nos ha legado.


El Legado es una busqueda personal, esa es una verdad fundamental, una forma en que dejamos atras conceptos aprendidos y temores provenientes de la ignorancia cuya fuente es el temor a lo desconocido.

Ya en nuestro corazon y cada dia, luchamos con nuestras propias limitaciones, la Recta Intencion debe ser un modo de vida y una sana ambicion para nuestra existencia. Esto es asi debido que la inspiracion a las cosas mas elevadas se encuentra cerca de nosotros, dentro de nosotros, observando cosas simples, en la serenidad de una contemplacion por ejemplo.

El amor es un sentimiento elevado y muchos estamos muy lejos de alcanzar esos estados en que el corazon parece inflamar de un amor sin condicion.

Sin embargo y desde nuestra propia pequeñez, Boheme nos dice "se humilde y no busques la adulacion", porque el trabajo se hace de corazon, y aquello que se hace con alegria no requiere recompenza.

La adulacion es agradable, nos gusta, nos implulsa, nos hace sentir sabios, poderosos, sin embargo en soledad, en nuestra propio rinconcito, solo somos una llamita y luchamos con todas las fuerzas para que no se extinga -y a veces parece que si lo hace-.

Este no es un sermon, ni un consejo, ni una enseñanza magistral, sino el intento de darnos cuenta que el trabajo es constante y que nadie esta en un pedestal de adoracion, sino al contrario, ya que para ser verdadero maestro, hay que postrarse ante las enseñanzas del aprendiz.

La humanidad es como la piedra que se lanza al rio, solida, dura, segura de sus verdades, dogmas y temores, sin embargo solo es el fuego, el elemento que vivifica la roca y la hace moldeable.

Asi como la roca, nuestro ser es perfectible, no en grandes templos, no con grandes discursos, no con grandes pompas sobre lo que hacemos, sino en aquel pequeño rincon del que antes hablé, ese rinconcito, en que nos vemos como de verdad somos, no santos, no pecadores, sino simplemente: llamitas.

11 comentarios:

I. Robledo dijo...

La vida, amiga, en el fondo, es mas sencilla de lo que parece...

Las apariencias que se brindan ante nosotros nos engañan y lo complican todo.

Un abrazo, Janeth

Luna maya dijo...

Buenos días. Hoy el viento sur despertó de fuego al amanecer y un fulgor dorado baña las púpilas perezosas y aún dormidas de la ciudad. Mi llamita interna se siente agradecida de tan bello espectaculo y sonríe, y se llena de luz. Feliz día janeth. Un besito.

isis de la noche dijo...

Qué bella enseñanza la de este maestro...

Y tus palabras la acompañan perfectamente: el ego es el gran adversario. Mi maestro decía que es el egoísmo, en todas sus formas, el enemigo a derrotar. Y ya lo dicen otras enseñanzas que uno de los principales adversarios de nuestro crecimiento espiritual es la claridad, esa falsa luz que nos hace creer que 'ya hemos llegado' y nos aleja de la posibilidad de seguir caminando.

El ego es un adversario terrible pero muy astuto. Y se alimenta del adulo, como bien dices.

Por eso, no me cuesta entender por què uno de los màs tenaces empeños de un maestro verdadero es acabar con la importancia personal del discípulo...

Gracias una vez más por tu luz, querida amiga... Por estos instantes de reencuentro con ese 'rinconcito' que nos permiten tus palabras..

Besos miles y un inmenso abrazo!!!! Que tengas un maravilloso fin de semana ;)

lanochedemedianoche dijo...

Hola no sabes qué lindo que es leerte, ya sé que tú no quieres que diga que tus letras son magistrales, pero nos elevan, esa llamita sube crece y fluye libre, no sabes que bien me siento luego de leerte, gracias amiga, si puedes recomiéndame algún libro del maestro.

Besitos de luz

Adriana Alba dijo...

Que nunca se apague la llama! para iluminar e iluminarnos, gracias Janeth, no conocía a éste autor!

Abrazos luminosos!!!

Janeth dijo...

Antiqva mi amigo del alma que razon tienes en lo que escribiste, la vida es sencilla, facil y simple, nosotros somos lo que lo complicamos todo, es bueno para mi que estes aqui mi buen amigo....

Pepi que cosas mas bonitas escribes, que gran placer contemplar semejante espectaculo un amanecer, la alborada de un dia que empieza....Muchas gracias por tus letras, tus palabras son un remenzo de paz...

Isis, gracias a ti por tus palabras, es una certeza que el trabajo interno contra uno mismo "el ego" es titanico.

La lucha con el dragón -escribe Jacobo Boheme, en una de sus Epístolas teosóficas-, es la lucha que Cristo y el Amor divino libran en la naturaleza del hombre contra el amor propio, contra esa voluntad del ego o "propio yo" que, al distanciarse de la Voluntad de Dios y pretender erigirse en centro independiente, enciende la Ira o Cólera divina, cuya propiedad es el luego devorador, o, lo que es lo mismo, "la angustia, la discordia y el conflicto".

Medianoche, gracias amiga por tus dulces palabras, agradesco mucho tu simpatia, me da mucho gusto poder ayudarte, saber que mis letras te ayudan es para mi una alegria inmensa, te puedo recomendar estos libros que de alguna manera marcaron mi vida espiritual, "Confeciones" "La llave", "Dialogos Misticos", son las tres grandes obras de Boheme que lei y ayudaron mucho para encontrar mi sendero...

Guzman es un placer saber de ti gracias por venir, un saludo fraterno para ti.

Adriana, gracias a ti, asi es amiga que esa llamita siga encendida para iluminarnos y sentirnos que somos uno ante la majestuosidad del cosmo,...gracias siempre por estar
Besitos miles
Janeth

BUENAS NOTICIAS dijo...

Mi hermano me habló de Jacob Boheme, querida Janeth, gracias por recordarme sus palabras y por recordarme que somos llamitas intentando recuperar una luz que, a veces olvidamos, ya somos.
Es cierto, el ego siempre nos despista, hace que nos perdamos y nos liemos...
Un abrazo fuerte.

Belkis dijo...

Para lograr la motivación se requiere conocer y orientar los deseos, necesidades y expectativas; hacia conductas positivas, dirigidas hacia acciones benéficas para la persona y su contexto social, no hay que dejar apagar esa llamita interior que todos llevamos.
Estupendo artículo Janeth.
Un abrazo

Janeth dijo...

Elena amiga, es un placer saludarte, que bueno que sepas de este gran maestro, el nos eneseña en su obra que la luz existe dentro de cada uno de nosotros, que lo importante es saberla apreciar y cuidarla para que no se apague...
Besitos siempre

Belkis amiga, tus palabras destilan certeza y sabiduria, amiga querida cuando andamos en el camino del espiritu, vigilando los pensamientos y cuidando nuestro actuar, siempre de la mano del misterio para no tropezar y caernos, aunque eso no siempre resulta ya que como humanos tenemos debilidades, la obra de este maestro que se basa en el amor y el despertar de la conciencia, nos indica que la voluntad del divino debe de ser la nuestra, es importante encontrar el equilibrio.

thot dijo...

No conocía a este Maestro.

No hay que dejar que se extinga la llama, sino que hay que alimentarla continuamente con su recuerdo.
Un beso.

Janeth dijo...

Thot, amigo gracias por escribir, procuremos "ver hacia adentro" y avivar nuestra llama espiritual