De dónde venimos cuando nacemos.


Pocas veces nos hemos detenido a pensar de dónde venimos cuando nacemos. 

Ya no se trata de la cuestión religiosa ni filosófica del origen de las almas. Se trata de algo más simple: si llegamos a la vida, es que venimos de alguna otra parte, sea esta cual sea, y sea como sea. ¿No dejaremos acaso seres tristes y llorosos en esa otra parte, cuando la abandonamos para dirigirnos a la tierra de los vivos? 

Lo que los padres festejan con alegría, ¿no será un dolor para otros padres inmateriales que ven partir un alma que les acompañaba hasta ese mismo momento? 

Y cuando morimos y dejamos la tierra, ¿hacia dónde vamos? Si de algún sitio venimos, es seguro que hacia otro sitio vamos. En el infinito no caben los límites definidos. Y allí donde vamos, ¿no nos recibirán con risas y alegrías de reencuentro, mientras nuestros deudos nos lloran en la tierra?

Sacado de mi otro blog "Rozando el Misterio"

9 comentarios:

Raul Miranda dijo...

No sabemos de dónde venimos ni adónde vamos, pero no importa: sabemos que procedemos de lugares benéficos y allí iremos a parar. Es más, es mucho mejor desconocerlo porque ello quiere decir que pertenecemos a algo enorme, inmenso, que no podemos comprender.

Ximena dijo...

ESTO REALMENTE HA CAMBIADO MI VIDA… MIL GRACIAS

Soledad dijo...

Cuando nacemos, hay como una nube que de alguna manera condensa nuestras almas en gotitas; cada uno somos una gota, y esas gotas se reúnen, caminan, todos juntos formamos sociedad, nos unimos,formamos grupos, hasta que llega el momento en que desembocamos en ese mar donde "aparentemente" nos disolvemos. Y tal vez haya una Fuerza cósmica que nos eleve otra vez, que nos convierta de nuevo en aquellos espíritus que descienden sobre la Tierra.

Luis dijo...

Creo que todo tiene una razón de ser, nos ponen en el escenario del mundo, en España, en Tanzania o en cualquier lugar en que hayamos nacido; aparecemos, somos niñitos, nos dicen éstos son mamá, papá, tío, abuelita; nos llevan al colegio, estudiamos, vivimos, amamos, odiamos, tenemos problemas y cuando aprendemos a vivir, la misma mano que nos trajo, nos empieza a sacar de la vida. Cuando tenemos más experiencia, cuando realmente podríamos manejar las cosas, entonces nos quitan y nos vamos.

Si todo esto no tuviese un sentido, si no tuviese una continuidad, este mundo estaría loco.

Ramiro Jordan Alvares dijo...

Es muy bello pensar que a veces los animales, las plantas y los árboles mueren en paz, porque tienen un conocimiento que nosotros hemos perdido al haber intelectualizado demasiado la vida. Hemos perdido el conocimiento de nuestra propia eternidad, hemos perdido el conocimiento de nuestra vida interior, hemos perdido el conocimiento de nuestra Alma inmortal.

Micaela dijo...

Querida Janeth, realmente creo que venimos de un lugar maravilloso al que luego regresamos después de morir para reencontrarnos con los seres amados. Muy bonito. Un fuerte abrazo.

MAJECARMU dijo...

Mi querida amiga,gracias siempre por tu presencia...Tus posts nos ayudan a profundizar e ir más allá de la materia...El cielo nos atrae poderosamente,la luz nos impulsa,nos abraza y nos dá la vida y entre el cielo y la tierra aprendemos los sentimientos, aprendemos a elevar el espíritu...Voces internas y misteriosas siempre nos llaman,nos inspiran y nos hacen soñar...Nuestra alma busca el amor divino y se equivoca...Vamos caminando poco a poco hacia nuestra casa,la que dejamos hace tiempo...
Mi gratitud y mi abrazo inmenso,compañera y amiga.
M.Jesús

I. Robledo dijo...

No sabemos nada...

Quizas, dicen, venimos del Amor y volvemos al Amor...

Pero ¿quien sabe?

Un abrazo, amiga

purple dijo...

Justo acabo de leer unos libros de este blog lasleyesespirituales.blogspot.com.
si te interesa son gratisd y para mi interesantes..
Un saludo Janeth y hasta la vista..por que seguro que sacaras algunas lineas en las que sientas que eso ya lo sabias.