Símbolo y tradición de la Navidad



 

En el símbolo y tradición de la Navidad, la ley viene dada a través de la profecía de la llegada de un niño rey que traerá un nuevo mensaje (de ahí que en los evangelios, Jesús siempre este repitiendo: "oísteis que se os dijo…, pues yo os digo…"), este nuevo mensaje o ley sería el cosmos, la nueva luz que tiene que sustituir o transformar al cosmos anterior, porque ha finalizado su tiempo y ahora ya no sirve; pero este no se retirará sino que perseguirá al niño en incluso amenazará a la madre como podemos ver en Apocalipsis 12.

En todas las culturas se habla de un lugar en el que se dio origen a la civilización (o a su civilización) y en el que tenían un contacto directo con la deidad. 

Esos lugares muchas veces etimológicamente significan ombligo, otras no, pero de ese lugar prácticamente todas las civilizaciones hablan (Edén en la tradición cristiana, Cuzco en Perú, Rapa-Nui…).

Continuaremos con este interesante tema, en próximos post.

5 comentarios:

Un par de neuronas... dijo...

Los solsticios han sido una fuente de inspiración natural para el hombre. Cada creencia los ha manipulado en su interés, la luz... la renovación..., el color rojo... adornar árboles... creencias de hace más de 5000 años. Te interesaría leer "Ritos y mitos de la Navidad" de Pepe Rodríguez.

Un beso y mis mejores deseos pata ti y los tuyos.

Escribir es seducir dijo...

INTERESANTE TEXTO

SALUDOS

MAJECARMU dijo...

Janeth,todas las culturas tienen su tradición y su historia...Sin embargo se unen en un mismo punto de amor y renovación.
QUE LA LUZ DEL BELÉN ILUMINE TU CORAZÓN TODO EL AÑO 2012 Y SIGA ILUMINÁNDONOS A TODOS A TRAVÉS DE TU BLOG.
Mi abrazo grande y sé feliz siempre.
Todo mi cariño y hasta pronto,amiga.
M.Jesús

Luna maya dijo...

Mis mejores deseos para ti siempre, en estas fechas especiales y cada dia. Un fuerte abrazo. Pepi Viedma.

MarianGardi dijo...

Totalmente de acuerdo querida Janeth.
Feliz Navidad, gracias por habernos dado tanto este año y que el próximo continúes con el mismo testimonio y generosidad.
Un cálido abrazo