El espíritu también recuerda.....


Recuerdo es la capacidad que tenemos de atraer a la conciencia presente algo que estaba en el pasado, algo que de pronto se vuelve claro y nítido y vuelve a vivirse de nuevo. Es como si el recuerdo nos presentase la posibilidad de vivir muchas veces un mismo hecho, pero sin necesidad de repetir la circunstancia, porque es esa función psicológica la que nos permite rehacer el escenario.

El espíritu también recuerda. Es eterno y permanece, recoge experiencias constantemente, aquí y en el más allá. Pero tiene una dificultad, y es que no cuenta con una conciencia lo suficientemente despierta como para recoger sus experiencias y hacérnoslas comprender racionalmente. Nuestra conciencia recoge todo lo que nos pasa como personas, pero no recoge con claridad lo que nos pasa como espíritus. Recordamos buenamente aquello en donde ponemos nuestra atención, y la ponemos en lo que nos interesa. Somos así de simples. Prestamos atención al frío, al calor, al dolor, al hambre, al cansancio, al enojo, al trabajo o al dinero; prestamos atención a un ámbito muy reducido, o al menos, muy específico: la persona y sus circunstancias materiales. Allí está todo claro, allí se mueven los recuerdos, y allí está el límite de la memoria.

El hombre que es fiel, que se recuerda, que se reconoce, que se construye, tiene memoria. Ese hombre probablemente no pueda contestar con toda certeza al quién soy, pero podrá decir algo que reviste para nosotros la máxima importancia y nos ayuda a dar el primer paso, un paso por el camino de la evolución, y es decir al menos: ¡Yo soy!

10 comentarios:

Adriana Alba dijo...

Querida Janeth, con tu permiso voy a colocar parte de éste texto en mis comentarios de el post de hoy, que seguramente has leído, por supuesto citando tu autoría.

Yo también creo que el el espíritu o el alma recuerdan y esa suerte de "sincronicidades" de vibraciones se captan, pero a pesar de que lo sabemos teóricamente cuando ocurre, como me suele ocurrir en ocasiones, la experiencia es siempre nueva y me sorprende.

Si no estás de acuerdo me avisas con otro comentario y lo borro.

Gracias y besos.

Unknown dijo...

mE UNO AL DECIR DE ALBA... YO TMABIEN CREO QUE VENIMOS CON UNA INFORMACIÓN... UN RECERDO ALGO SIMIL... COMO SE ENETIENDE SINO QUE UN NIÑO DE CUATROA ÑOS TOQUE SINFONÍAS SIN HABER APRENDIDO MÚSICA COMO MOZART.

EL ALMA TIENE MEMORIA.

GRACIAS POR TAL ENTRADA QUE DESPIERTA CONCIENCIAS DORMIDAS.

Además agradecerte tu visita
dciendo:

Ha querido propiciar mi destino
Encontrarte en mi camino
A través de un espacio singular,
Dónde anidan gentes sabias,
Inteligentes, con dones,
Alegres, vitales, generosas,
Solidarias,
Que hacen un culto
De la amistad.
Por ello quiero
Dejar en mi huella
Un cofre con cariño
Para cuando nadie te abrace.
Mi mano extendida
Para cuando no tengas apoyo.
Mi mirar
Para cuando no puedas ver.
Y mi amistad verdadera
Cuando el horizonte
Se presente nublado.
Porque hoy decidí
Dejar mi huella
Con abrazo a puro sentir
Y celebrar en paseos
La amistad
En agradecimientos
De habernos encontrado
Con promesa de estar!
Dejo mi huella
Junto a una invitación
A mis blogs
Dónde te esperan
Decires y Premios
Poemas Y Reflexiones,
Arte y Recetas
Y un Mate
Criollo Y Compañero
Como símbolo de amistad.

Un Cariño
Tuya
María del Carmen
www.panconsusurros.blogspot.com

Y de ahí a viajar por mis otros blogs.
gmariadelcarmen28@yahoo.com.ar

Luján Fraix dijo...

LOS RECUERDOS FORMAN PARTE DE LA VIDA Y DE UN PASADO EN EL QUE NOS FORMAMOS COMO PERSONAS QUE SOMOS.

ME GUSTAN MUCHO LOS RECUERDOS Y EN ELLOS ESTOY SOÑANDO TODOS LOS DÍAS, TRISTES O ALEGRES FORMAN PARTE DE MÍ

BESOS

Jurema dijo...

Hoy te he encontrado y me quedo para disfrutar de la belleza infinita plasmada en tu espacio.
Volveré!

Un saludo

Carolina dijo...

Y la memoria se hace todavía más débil, y se diluye más aún, cuando entramos dentro del terreno espiritual, dentro del individuo, de ese ser indiviso.

Alcira Handal dijo...

Lo que se diluye está en lo espiritual. Lo claro son los recuerdos y lo tenue son aquellos recuerdos del alma

Mahatma dijo...

El espíritu ES continuamente, no habiendo para él tiempo, sino solamente eternidad. Y ese espíritu está a veces sobre la Tierra, con cuerpo, y otras no está en la Tierra y no necesita cuerpo; gasta un cuerpo y toma otro. Lo importante no es la vestidura, sino aquello que se viste. Algo semejante nos ocurre desde el punto de vista físico: lo importante no es la ropa que usamos, sino lo que está dentro de la ropa. Lo importante es lo interno, lo esencial.

Raul Miranda dijo...

El alma tambien recuerda; pero si el alma está dormida, registra poco, y si registra poco, recuerda aún menos.

Melissa dijo...

Así pasamos la vida crucificados entre recuerdos concretos, recuerdos que se nos van pero no nos preocupan mucho, y recuedos del espiritu que de vez en cuando nos sacuden como obligándonos a tomar conciencia de algo más.

José Ramón dijo...

Janeth tu blog es esta lleno de conocimiento que dejan tu luz en cada entrada.

Saludos de José Ramón desde Abstracción textos y Reflexión